¡Que el espíritu navideño se apodere de ti y de tu equipo durante estas fechas tan señaladas!

Diciembre es el mes por excelencia en el que empiezan a surgir los sentimientos y los momentos emotivos, empieza la época en la que nos sentimos más solidarios, más tiernos, más filosóficos… Terminando esta época a principios de enero con la llegada de los tres reyes magos y pasando por la transición a un año nuevo. Es un momento en el que solemos estar más susceptibles a las cosas que pasan a nuestro alrededor, nos mostramos más generosos y agradecidos por aquello que tenemos y reunimos y cargamos energía para afrontar los nuevos propósitos para el año nuevo.  Una magia se apodera de las calles y las casas, es a lo que llamamos el valisoso espíritu navideño.

Nos encontramos con familiares, amigos, disfrutamos de días festivos, compramos regalos…. Son días muy intensos que vivimos compartiendo, sonriendo, haciendo feliz a otros, amando, perdonando, encontrando la magia, ilusionando… Son fechas que, aunque hay unos que lo celebran o lo creen más que otros, no podemos negar que a todos nos influye y que son unas fechas muy importantes y a tener en cuenta. ¡Siempre podemos hacer que aquellos que creen que no tienen muchas razones para sonreír lo acaben haciendo!

Desde EB, creemos que el espíritu navideño es mágico. Creemos que vale la pena luchar por seguir sintiéndolo y transmitirlo a quien nos rodea. Creemos que es un espíritu que no se tiene que abandonar el resto del año, pero que es ahora, durante las navidades, que se acentúa y se tiene que aprovechar al máximo. Por esa razón, puntualizamos la importancia de sentirlo y de trasladarlo en el área de trabajo o negocio. Ya no solo para crear un ambiente especial estos días entre los compañeros de trabajo, sino para transmitirlo a todos los clientes.

Decora tu salón, haz regalos de navidad, ofrece packs especiales de belleza, haz un concurso, llena un árbol de luces y deseos, haz que los reyes magos te visiten, ofrece galletas de jengibre o turrón… ¡se feliz! ¡Da valor e importancia a todas y cada una de las tradiciones como la que desde hace años llenan los ojos de las más pequeños (y no tan pequeños) de ilusión!

Y recuerda, el objetivo no es solo aumentar ventas ¡Sino crear un ambiente de ilusión y positivismo que valdrá mucho la pena!

 

 

¡FELIZ ESPÍRITU!